Siempre fuí de caminar y hundirme hasta las rodillas si hacía falta. Pero nada, que parece que se hay que adaptar a los tiempos! Asi que me estreno en el raqueteo por obligación. Y para probar, me subo al Cerro Mondain con el compañeru de fatigas, después de alguna aventura con el coche y de que nos preguntasen 3 veces la guardia civil y los forestales si eramos nosotros los que teniamos problemas y los que estábamos perdidos...
Y al día siguiente, el bautizu! Salimos en estampida, como los jabalíes, desde Astún. Menudu grupu. Metemos mieu po la cabeza.
Pa calentar cogemos la mayor pendiente que encontramos en tou Astún, pa eso somos unu de cada pueblu y a cada cual más cabezón.
Con un calor de +28 grados a la sombra, pocu a pocu vamos subiendo. A onde no lo sabemos, pero el objetivu ta claru...
Y después de no se cuantu tiempu, una buena sudá y col culo un pocu prietu, llegamos a cumbre...
Cumbre clara y francesa: Pic de Belonseiche. Ahora vas y lo tuiteas! No lu conocen ni en casa!
Pero habrá que celebralo! Oye, y bien guapu eh. Recomendau 100%. Haya salú pa muchos más! Brindo por ello!